Licenciado en ciencias químicas por la Universidad de Barcelona, obtuvo también las licenciaturas de física y matemáticas por la Universidad de Montpellier. Trabajó como ingeniero químico en el Instituto Químico de Montpellier en esta misma universidad (1941) y fue doctor de estado en ciencias físicas por la Sorbona (París, 1948).

Carlos Bas y Peired nació en Barcelona. Estudió en la Escuela Pia Sant Antoni (Barcelona), y de muy joven se sintió atraído por las ciencias naturales. Finalizada la guerra, en 1942, pudo empezar los estudios en la Universidad de Barcelona. Inicialmente se interesó por la botánica, materia de sus primeras publicaciones.

Cursó en Barcelona la carrera eclesiástica y la de ciencias naturales. En 1920 se doctoró en Madrid con una tesis sobre el Jurásico de la provincia de Tarragona. Se inició en geología y paleontología en el museo geológico del seminario conciliar de Barcelona -museo fundado por Jaume Almera, de quien fue discípulo-, bajo la dirección de Marià Faura i Sans.

Fue miembro de la Acadèmia de Ciències i Arts de Barcelona, de la Institució Catalana d’Història Natural, de la cual fue presidente dos veces (1906-11), y del Institut d’Estudis Catalans (IEC), de la sección de ciencias del cual también fue presidente (1911).

Licenciado en Ciencias Naturales por la Universidad de Barcelona (1947) y doctor desde 1950 con una tesis sobre la vegetación del Montseny. Discípulo y más tarde colaborador de Josias Braun-Blanquet, fue el introductor de la metodología sigmatista del estudio de la vegetación en Cataluña.

En 1934 fue nombrado conservador de herbarios del Instituto Botánico de Barcelona. En 1939 tuvo que hacerse cargo de la dirección del Instituto Botánico, y mas tarde fue nombrado director del Instituto Municipal de Ciencias Naturales. 

Catedrático de historia natural en la Universitat de Barcelona (1900), fue separado a causa de sus ideas evolucionistas. Fundó y dirigió (1907) el Laboratorio de Biología Marina de las Baleares, en Mallorca, y posteriormente el Instituto Español de Oceanografía. En 1939 se exilió a México.

Definido por su modestia, Joan Cadevall «no aspiraba que su nombre figurase algún día al lado de los de Costa, Trèmols, Vayreda…, respetabilísimos; se habría contentado en ir detrás de ellos, a una distancia prudencial…», como indicaba el botánico Pius Font i Quer en la larga nota necrológica que le dedicó. Pero no fue así, Cadevall se convirtió en uno de los científicos más destacados de finales del siglo XIX y principios del XX en Catalunya.

Era una persona que deseaba aplicar tanto como fuera posible las novedades de la ciencia moderna. De temperamento abierto y franco, si una cosa le gustaba la elogiaba libremente, pero, si no le gustaba la criticaba con la misma libertad.

Médico y catedrático de bioquímica en la facultad de Medicina de la Universitat de Barcelona. Carreras fue uno de los principales impulsores de la bioquímica en Cataluña durante los últimos 40 años. Su obra docente e investigadora fue esencial para recuperar el trabajo del Instituto de Fisiología, creado por August Pi i Sunyer en 1921 y suprimido al finalizar la Guerra Civil Española el 1939.