Nació en Valls en 1913. Se licenció en Ciencias Físico-Químicas en la Universidad de Barcelona (1934) y se doctoró en Ciencias Físicas en la Universidad Complutense de Madrid (1944), con una tesis sobre la conductividad eléctrica del aire, dirigida por el Dr. Isidre Pòlit (Alella, 1880 – Barcelona, 1958).

Durante la Segunda República, en 1935, fue nombrado ayudante de Meteorología en Madrid, donde realizó trabajos sobre electricidad atmosférica bajo la dirección del profesor Arturo Duperier (Ávila, 1896 – Madrid, 1959). Durante la Guerra Civil trabajó en el Observatorio del Retiro de Madrid. El año 1941 fue ascendido a meteorólogo y fue destinado a Barcelona. En 1945 pasó a ser jefe de Meteorología de la Región Aérea de Zaragoza, y jefe de la Sección de Aeronáutica de la Oficina Central Meteorológica en Madrid. Hay que recordar que la Meteorología fue una competencia del Ministerio del Aire. Cuando falleció era el meteorólogo más veterano en Cataluña y en toda España y era todo un referente del sector a nivel estatal.

Ganó las oposiciones a la cátedra de Mecánica Física y Termología de la Universidad de Granada en 1948 y aconteció catedrático de Termología en la Universidad de Barcelona (UB) en 1949, de la que se jubiló al cumplir la edad reglamentaria en 1983. En la Universidad de Barcelona fue vicedecano de la Facultad de Ciencias entre el 1962 y el 1969.

Fue autor, “con la colaboración de Mercedes Potau de Vidal” su esposa, del Curso de física, que tuvo muchas ediciones. Con el Dr. Gandia fue autor de los libros Problemas de física (1961) y Problemas de Mecánica y Termología y fue traductor con Mercedes Potau de otras obras como por ejemplo el Tratado de Física de Westphal. En la UB impulsó la creación de un destacado grupo de investigación de microcalorimetría. El año 1978 fue designado para leer el discurso inaugural del curso académico 1978-79 de su universidad con el título La Ciencia del calor. También fue presidente nacional del Grupo de Termodinámica de la Real Sociedad Española de Física y Química (1976-1978) y en 1976 recibió la Gran Cruz de Alfonso X el Sabio.

En 1961 pasó a ser académico de la sección segunda de la Real Academia de Ciencias y Artes de Barcelona (RACAB). Ingresó leyendo la memoria Consideraciones acerca del concepto de la temperatura, Memorias de la Real Academia de Ciencias y Artes de Barcelona 3ª época, v. 33, n.º 17 (1961). Tuvo una constante dedicación en la RACAB y ostenta un récord de asistencia a sus sesiones. Del 1984 a 1994 fue su vicepresidente.

Fruto de esta actividad en la RACAB publicó varias memorias e hizo las respuestas de los discursos de entrada de nuevos académicos como Miguel Azpíroz, Pedro Pascual i Miguel Puigcerver.

Murió en Barcelona el 6 de mayo de 2019, a punto de cumplir 106 años de edad.